Con la asistencia de los dirigentes sindicales de los puertos de Arica, Iquique, Antofagasta, Coquimbo, San Antonio, Valparaíso, Talcahuano, Puerto Montt y Punta Arenas, la Federación Nacional de Trabajadores Portuarios de Chile, se reunió para celebrar su asamblea nacional en el Centro de Eventos “Entre Valles” en la ciudad de Villa Alemana, los días 23, 24 y 25 de abril de 2010. Esta Asamblea, fue una síntesis y reflexión de lo logrado, un reconocimiento por el trabajo político sindical realizado. Los resultados objetivos de este trabajo sindical fueron los siguientes compromisos:
La Fenatraporchi, ante el cambio de Gobierno producido en el país, estima necesario declarar que sus objetivos esenciales como organización sindical, mantienen plenamente su vigencia y urgencia. En consecuencia, la protección del empleo, del trabajo decente, del desarrollo armónico del país y de los derechos fundamentales de todas las personas, continuará siendo el eje de nuestra actividad sindical.
La Federación es una institución democrática, como tal, postula un estado donde la participación de los ciudadanos y, en particular, la voz de los trabajadores sea fomentada, respetada y escuchada, por la Administración, la empresa y la sociedad civil en su conjunto. Fenatraporchi es parte y adhiere a la política laboral y social definida por la Central Unitaria de Trabajadores y en lo concreto llama a todos sus socios a participar de las actividades de conmemoración del 1º de mayo que organice la CUT a lo largo del país
Las nuevas autoridades deberán enfrentar una industria portuaria en un punto de inflexión. El peligro de la concentración monopólica, el desorden institucional y las ineficacias que le son propias, el empleo precario, entre otras debilidades del modelo, limita gravemente el desarrollo de los puertos y del país.
La Fenatraporchi intentará colaborar junto a todos los actores de la industria en destrabar estas situaciones, para lo cual, propondrá al Ejecutivo la adopción de las siguientes medidas inmediatas:
Radicar la planificación estratégica de la política portuaria nacional en el Ministerio de Transportes, a quién corresponde por ley esta función.
Preparar un Proyecto de Ley General de Puertos que ordene y jerarquice a las diversas instituciones que intervienen en el sector. No hacerlo cuesta puestos de trabajo, como actual limitación a los cruceros; calidad de vida, como en la relación ciudad-puerto y desorganiza las inversiones públicas y privadas en el sector.
Nombrar directorios comprometidos con aumentar el valor de las empresas portuarias públicas. Estas empresas son herramientas al servicio de las regiones donde se insertan, cuya actividad no termina con la concesión de sus recintos, sino que, utilizando las posibilidades de gestión de la ley 19.542 permiten crear actividad, empleo y riqueza.
Suspender las licitaciones de terminales portuarios públicos hasta definir la política de desarrollo en el sector. Hoy se enfrentan diversas alternativas de desarrollo portuario: construir un puerto de nivel sudamericano; privilegiar una ciudad en perjuicio de otra; favorecer la ampliación de los actuales concesionarios; entregar la operación de puertos públicos sin inversiones significativas, etc.
Estas materias, exigen una discusión profunda y reflexiva donde prime el interés general sobre el particular y donde sean escuchados todos los sectores, la que debe culminar con una política orgánica de desarrollo portuario en beneficio de todos los chilenos, que hoy no existe.
La suspensión de las licitaciones en marcha del puerto de Coquimbo y de los Espigones de San Antonio y Valparaíso, permitirá adoptar estas decisiones sin la presión de grupos de interés, lo cual es plenamente consistente con la realidad de las cargas proyectadas, como consecuencia de la crisis económica que afecto la industria el año 2009.
Enviar un Proyecto de ley que erradique el trabajo precario de los puertos. El contrato de trabajo de portuario eventual es el símbolo de la precariedad desde cualquier punto de vista, y sólo beneficia a ciertos empresas de muellaje las que endosan sus utilidades al gasto social que debe asumir el estado, en los planes de capacitación, redes de protección y planes de desvinculación que se otorgan año tras año a estos trabajadores sin empleador.
El terremoto y maremoto del 27 de febrero pasado dañó los puertos de Valparaíso, San Antonio y San Vicente, pero destruyó completamente el Puerto de Talcahuano. Proponemos al Gobierno la adopción de un Plan de Reconstrucción de este puerto que privilegie su rol pesquero, turístico e inmobiliario, iniciativa que reconstruirá una parte muy importante de la zona cero, creando empleos estables para numerosos trabajadores.
En este sentido proponemos al Gobierno adoptar la decisión de financiamiento de este proyecto, destinando el 100% de los recursos que la Empresa Portuaria Talcahuano San Vicente recupere por aplicación del seguro comprometido a este fin.
En defensa de los derechos de los trabajadores de las empresas portuarias públicas se resuelve:
a) Promover la presentación a los nuevos directorios y al presidente del Sistema de Empresas Públicas de todas las materias laborales pendientes o postergadas por la anterior administración.
b) Promover la igualdad de condiciones laborales y contractuales en las diversas empresas.
c) Promover la acción coordinada de los representantes de los trabajadores en los directorios, de modo de plantear de mejor forma la voz de los trabajadores en todas las instancias donde sea posible.
d) Continuaremos con los esfuerzos de educación sindical para todos los trabajadores y dirigentes de nuestra organización.
Fuente: Fenatraporchi
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